Por Uxío PR.
Los cefalópodos son los animales más desconocidos e increíbles que existen, resulta llamativo que hasta hace relativamente poco tiempo no se conocían apenas algunas de las especies más grandes, inteligentes y fascinantes que, aunque nos sorprenda, habitan este planeta, en un lugar inexplorado, los fondos oceánicos.
Situémonos en el tema:
Cefalópodo viene del griego kephalé (cabeza) y podós (pié), existen unas 700 especies distintas, aunque se cree que quedan muchas por descubrir, la agrupación más común es la siguiente:
Pulpo (Octopoda)
{width=”387”
height=”313”}
Calamar (Teuthida)
{width=”384”
height=”169”}
Sepia (Sepiida)
{width=”386”
height=”288”}
Nautilo (Nautilina)
{width=”387”
height=”289”}
Maestros del disfraz
Este impresionante hecho fue descubierto hace muy poco, pongámonos en situación, un grupo de buceadores observa cómo un macho de sepia gigante protege a su hembra en plena época de apareamiento, es el macho más grande, por lo que parece tener asegurado tener descendencia.
Por delante de sus ojos, se acerca otra sepia hembra, el macho no
reacciona ante su presencia, otra hembra no supone una amenaza, la otra
hembra se coloca detrás de la primera, y la acaricia con sus
tentáculos, y se acerca más, como si realizasen el apareamiento, en
ese momento, la hembra intrusa suelta un destello y se convierte como
por arte de magia en un macho, el macho dominante lo expulsa, pero ya es
tarde, **el apareamiento furtivo ha terminado.
**
Es tan sólo una muestra más de la capacidad de camuflaje e inteligencia de estos animales, las sepias macho pequeñas, aparentemente sin oportunidades de reproducirse, son capaces de adoptar el color y los movimientos de una hembra, para burlar el dominio del macho dominante
Brain training Octopus
Los cefalópodos han demostrado tener inteligencia, memoria y capacidad de aprendizaje; hay una especie de pulpo, llamada Thaumoctopus mimicus (pulpo imitador), que tiene la extraña habilidad de imitar a otros animales a su conveniencia.
Foto del pulpo «mimo» o imitador:
Pero no sólo eso, el pulpo observa su alrededor, y memoriza las especies que otras temen, y de este modo, si por ejemplo se le acercan peces damisela, el pulpo imita la serpiente marina rayada, que es el depredador de estos peces, y para ello cambia al color negro y amarillo, e imita perfectamente sus movimientos gracias a su enorme flexibilidad, se han contabilizado hasta 15 imitaciones diferentes, en una especie de sólo 60 cm de longitud, imaginaos de lo que serán capaces los pulpos de mayor tamaño.
Los pulpos pueden adoptar las formas más variadas por su flexibilidad, gracias a ser un animal invertebrado, puede contorsionarse y pasar por lugares realmente estrechos, habitualmente se esconden en grietas de roca inaccesibles para sus depredadores.
Escribiendo con las sepias
Los científicos están impresionados por la inteligencia de estos animales, y se han realizado múltiples experimentos que demuestran lo poco que los conocemos, uno de estos experimentos consiste en hacer que las sepias escriban.
Pero no lo hacen con un bolígrafo, el científico les muestra una pizarra con X dibujadas, y las sepias, desde su pecera lo observan, tras esto el científico les da de comer, y los animales asocian esa X a la comida, con el tiempo acaban dibujando en su propia piel las X a modo de pedir comida, y no sólo son capaces de escribir X…
El tamaño importa
La especie que más nos impresiona es sin duda la de los Architeuthis o calamar gigante, una especie de la que conocemos muy poco, y que pese a su tamaño, entre 15 y 20 metros, eran parte de los cuentos de los marineros, hasta que la ciencia pudo comprobar su existencia.
Además de las ventosas en sus tentáculos, esta especie incorpora unos enormes ganchos o garras con el que sus presas tienen prácticamente imposible escapar, además su visión por contraste le permite ver a cualquier animal por muy camuflado que esté.
Sobre su comportamiento e inteligencia, tenemos una enorme laguna de conocimiento, la imposibilidad de mantenerlos vivos en cautividad, y los oscuros abismos oceánicos en los que habitan, hacen que su estudio sea prácticamente imposible.
Sus ojos y su cerebro son de los más grandes del reino animal, el ejemplar más grande jamás contemplado fue en aguas neozelandesas, varado en la playa se encontró un Architeuthis de 21 metros y 275 kilos de peso.
Apenas tenemos imágenes y referencias sobre la variedad de estos animales.
Foto histórica del Architeuthis
Hasta el año 2005 no teníamos una foto de estos animales (Architeuthis) en libertad, lo consiguieron los japoneses gracias a cámaras con sensores de movimiento, enfocando a un lugar fijo, un día por casualidad pasó por allí un Calamar gigante, convirtiéndose en una foto histórica para la ciencia.
He aquí una de las fotos, publicada por National Geographic:
{width=”393”
height=”303”}
Tentáculos agresivos
Cuando hablamos de calamares, muchos pensamos en comida, sin embargo, en los lugares donde pescan ciertas especies de calamares gigantes que pasan parte de su vida cerca de la superficie, no lo tienen tan claro, ha ocurrido en varias ocasiones que un pescador se cae al mar, y varios calamares de entre uno y dos metros de longitud lo arrastran hasta las profundidades para devorarlo poco a poco.
{width=”394”
height=”301”}
Los calamares poseen debajo de la cabeza un pico que utilizan a modo de cuchillo, con el que despedazan a tiras a sus presas, el hombre no es habitual en su dieta, pero son totalmente agresivos con otras especies y con ellos mismos, los pescadores cuentan que cuando un calamar cae en el anzuelo, deben sacarlo pronto, antes de que sus congéneres lo devoren.
La leyenda del Kraken
Los avistamientos de calamares gigantes ha dado lugar a la leyenda del Kraken, un pulpo gigante que emergía del mar y hundía barcos devorando a sus ocupantes, sin embargo, los calamares gigantes (los pulpos gigantes no existen) jamás atacarían a alguien que está fuera del agua, pues no es su medio.
Representación del Kraken:
{width=”363”
height=”542”}
Aunque estos animales no son tan sanguinarios como los pinta la leyenda, mejor no meterse en el agua en su presencia.
Otra leyenda urbana que persigue al Architeuthis es su fama de pelear con las ballenas, sin embargo, las ballenas son sus depredadores, éstas se sumergen a grandes profundidades para cazarlos, se han encontrado enormes ganchos del tentáculo del Architeuthis en el estómago de ballenas varadas, un tamaño de gancho que hace pensar que en las profundidades sí podrían habitar cefalópodos muchos más complejos y fascinantes que el ficticio Kraken.
Recientemente el proyecto español llamado precisamente «Kraken», estudia a esos desconocidos animales, salido del puerto de Vigo, en el barco en el que se estudian estos animales, tienen las mismas sensaciones que Neil Armstrong cuando pisó la Luna, pues los fondos marinos son más desconocidos que la superficie de nuestro satélite, aunque parezca una ironía.
Su inteligencia, su misterio y sus fascinantes proporciones hacen que el interés general por estos animales siga creciendo, prueba de ello es la apertura de un museo dedicado al calamar gigante en Asturias:
Eso es, creo yo, lo más sorprendente del mar: su fuerza, el hacer que todo lo que habita y se mueve en él parezca un milagro que no tiene igual en la Tierra.
Laurens Van Der Post, Der Jäger und der Wal