[Uxío PR] Nos situamos en Tunguska, Siberia, una dura región de Rusia, en plena Taiga, con sus increíbles bosques, temperaturas extremas y duras condiciones de vida para la numerosa fauna y flora que lo habitan.
Retrocedamos al 30 de junio de 1908, 7:17 horas, un nuevo día amanece, un objeto luminoso aparece en el cielo, y en apenas segundos se produce una explosión equivalente a 185 bombas de Hiroshima detonadas a la vez, tan sólo el brillo de la explosión fue equivalente a 100 veces el de nuestro Sol (aproximadamente 29 megatones de TNT)
La explosión fue registrada por barómetros tan alejados del epicentro como los situados en Londres, aproximadamente 2.100 kilómetros cuadrados de bosque quedaron literalmente partidos en dos, las partículas brillantes que se liberaron hicieron posible leer de noche durante cuatro días.
Imagen tomada en una investigación posterior al suceso:
Esta incontrolada y pontente explosión sigue siendo un misterio aún hoy en día, según Don Yeomans, director de un laboratorio de la NASA:
«Si se desea iniciar una conversación con alguien dentro del ambiente de los asteroides, lo único que se debe mencionar es Tunguska»
Las condiciones de la zona impidieron que se llevara a cabo una investigación de los hechos, la primera expedición seria fue en 1927, se encontraron con un paisaje aún muy tocado por aquella explosión, pero no encontraron ningún gran agujero en el que aquel objeto luminoso que describieron algunos supervivientes pudiese impactar.
Ninguna expedición posterior encontró restos un un lugar de impacto, lo que sumó aún más misterio a la explosión de Tunguska, la teoría más aceptada es que un Meteorito o un Cometa entró en la atmósfera sin ser detectado, y explotó poco antes de tocar tierra, de ahí que no se hallase lugar de impacto, por contra se hallaron signos de devastación por todas partes.
Los lugareños describían algo muy similar a un hongo atómico, además de afirmar que ese día todo ardía, hasta la camisa que llevaran puesta.
La explosión fue fatal para la mayoría de los habitantes de la zona, aunque por fortuna pocos humanos fallecieron, ya que no es una región muy habitada.
San Petersbugo, en cambio, sí es una ciudad habitada, y se encuentra en la misma latitud que Tunguska, por lo que, esta poablación se salvó por apenas unas horas de rotación de la tierra.
El evento ha suscitado tanto misterio que hay más de 30 teorías sobre lo que pudo ocurrir en la Taiga rusa, algunas totalmente admisibles, como la formación de una bomba de hidrógeno natural, otras más excéntricas, como la que afirma que fue una nave extraterrestre la que produjo la explosión.
Un cometa es el principal sospechoso de esta explosión:
El evento de Tunguska no es el primero ni el último, los impactos de objetos espaciales en la superficie terrestre son bastante comunes, sólo que en ocasiones tienen consecuencias devastadoras, y debido al gran daño que puede hacer un objeto pequeño (sobre todo según qué elementos lo componen), son realmente difíciles de detectar y prever.
La región de Tunguska, hoy, un joven bosque en medio de una región con algunos de los bosques más antiguos del planeta:
Hasta ahora el ser humano ha tenido mucha suerte, la explosiones han ocurrido en lugares alejados de grandes núcleos de población, y esperemos que esto siga siendo así, ya que el espacio ya ha demostrado lo que puede pasar si una de esas bombas espaciales se acerca demasiado a la tierra.
Para saber más:
NASA:
Aniversario del evento de Tunguska:
Tunguska en Microsiervos: