Herramientas para salir de la crisis I

 

En vista de que las cosas se ponen cada vez peor, y que poco o nada anticipa que las cosas vayan a cambiar, he empezado a tararear como hago siempre en situaciones que me disgustan eso de «There must be some way out of here» y pienso que la version de Hendrix es una buena banda sonora para emprender cualquier viaje.

Después de los primeros escarceos infantiles, por otro lado normales, con la idea de que lo político puede ser impulsor del cambio, lo cierto es que a día de hoy estoy casi seguro, y es algo que ya hace tiempo que sospecho, que el único motor de cambio real es la sociedad civil, es decir, tú.

Las herramientas políticas que las constituciones otorgan a la población se han vuelto poco menos que valvulas de escape y que en el fondo se han institucionalizado de tal modo que apenas hacen mella en la reputación de los estados, por otro lado estos han aprendido paulatinamente a lidiar con ellas haciendo verónicas con ese instrumento que Marcuse llamó tolerancia represiva.

Una de las cosas que me preocupa es que el avance de los nuevos sujetos de Derecho Internacional internacional (distintos de los estados, claro). Esto era algo que me sonaba muy lejana cuando la estudiaba yo en Derecho internacional Público hace ya algunos años. A día de hoy es una realidad patente y abrumadora que los sujetos clásicos de Derecho Internacional Clásico, los estados, han sido absolutamente desplazados por otro tipo de entidades que detentan el poder real, esto ya no es el ideario de un friki conspiranoico, es la pura realidad. Lamentablemente, pues, los estados ya no son el enemigo, son solo hombres de paja que sufren los golpes de una sociedad civil cada vez más cabreada. ¿Pero entonces, qué debemos hacer? Pues arreglarnoslas como podamos…

Mi opinión, dejemos a los políticos hacer política, no sin protestar claro, pero ante todo empecemos poco a poco lo que podemos ya llamar revolucíon de lo distribuído.

He repetido hasta la saciedad, desde que lo aprendí de los indianos que Paul Baran, clasificó toda estructura en red en tres esquemas clásicos, e_l centralizado_, en el que toda comunicación pasa po un nodo central, el descentralizado, en la que toda comunicación entre dos nodos pasa por una pequeña red de nodos descentralizados y el distribuído en la que la que toda comunicación entre dos nodos puede ser directa o pasar por cualquier otro nodo de la red. Estando así las cosas la estructura más débil es la centralizada dado que un ataque contra el nodo central destruye toda posibilidad de comunicaciones, es decir si yo para hacer pagos tengo que pasar necesariamente por un único banco, basta controlar ese banco para controlar todas las transacciones económicas, el que tenga los medios para controlar ese único banco, puede controlar toda la red. En una estructura distribuída tendría que controlar toda la red para controlar toda la red, es decir la diferencia de medio a fin es cero, sólo el que tenga los medios para controlar toda la red la podrá controlar entera, lo cual es prácticamente imposible en determinados contextos.

Vale ¿Cómo distribuímos?

De momento vamos empezar con algo menos ambicioso que la propuesta de OpenEcology y empecemos por cosas que están más o menos a nuestra mano inmediata…

Distribución del consumo

Es probablemente una de las primeras cosas que planeo hacer cuando tenga yo cierta autonomía. Desde hace tiempo, hay incluso documentales sobre ello, está emergiendo el fenómeno de pequeñas comunidades de vecinos que se agrupan para adquirir alimentos directamente de los productores, sobre todo los productos frescos como legumbres, fruta, verduras etc… Mi intención era empezar por la cerveza y el vino… ejem. Con ello nos aseguramos una mejor calidad en los productos y probablemente un coste mucho más reducido. Ahora bien está el problema del transporte, bueno, pero existen soluciones como Hermeneus están pensadas para salvar estos problemas, en cualquier caso los indianos están trabajando en ello. Y ya lo tienen!!

Quizá no sea necesario, pero las Cooperativas de Consumo son la cristalización jurídica de este fenómeno y puede ser aconsejab le una vez se tiene ya un rodaje y un grupo social más o menos grande y ya consolidado. Si tenéis interes en este tipo de medidas os recomiendo que busqués una cooperativa o gupo de consumo con experiencia cerca de vuestra zona y habléis directamente con ellos, en Vigo, por ejemplo, tenemos O Arbore. En cualquier caso aquí tenéis un buen documento para empezar.

Distribución de la producción

La base teórica del negocio Open source comienza con un libro mítico de Eric S. Raymond llamado «La Catedral y el Bazar» publicado en 1997; en poco tiempo, 1999, una empresa que vivía del software libre da el salto a Wall Street y sus acciones obtuvieron la octava ganancia de primer día más grande en toda la historia de Wall Street; esa compañía se llamaba Red Hat y recientemente acaba de reportar unos ingresos que superan la barrera de los mil millones de dólares… Con ello ya no es posible decir que no se puede vivir del open source. Cuando la propia Microsoft crea una filial para llevar el negocio open source llamada Microsoft OpenbTecnologies es que algo está pasando… ¿Pero acaso el Open Source es sólo una cuestión de Software? Veamos, lo que se comparte en el open source es el conocimiento, la primera piedra de esta filosofía es que el conocimiento es libre y cualquiera debe poder aprovecharse de él y todos estamos llamados a incrementar ese conocimiento público, lo que no debe ser de nadie es la información, porque la información es poder, y el poder, como decía Montesquiau, abusará…

Pues con estas herramientas ya estamos preparados a empezar a entender lo que es el Open Hardware, y creo que puedo decir que esta es una de esas cosas que están llamadas a cambiar el mundo.

El primer proyecto open hardware que conocí se llama Arduino, una placa base que permite hacer de todo… con un par de búsquedas por internet os daréis cuenta de que hay bastante gente ganando dinero con Arduino, sea vendiendo componentes o incluso fabricando productos comerciales basados o que incluyen esta tecnología, siempre conforme a las normas de licencia. Dejemos de un lado Arduino porque es bastante complicado de entender, hablemos por ejempo de una bicicleta

El problema con el que uno puede encontrarse es que efectivamente la información es libre y se comparte fácilmente, es decir yo podría, como el caso Ikea, comprar las piezas de la bici y luego construirla siguendo las instrucciones, incluso haciendo cambios importantes en ellas, pero… Pero claro, esto no es suficiente, yo tengo que poder fabricar mis propias piezas… eso tiene un coste ¿cómo reducirlo?

Bien, existen dos opciones; Una, aprovechamos partes de otros objetos o elementos naturales que estén a nuestro alcance, por ejemplo la madera…

Otra respuesta, nos la da el Fabbing, ¿Que pasaría si tuvieras la posibilidad de construir casi cualquier pieza en pástico, o incluso en metal? Pongamos que junto a las instrucciones para construir tu bicicleta vienen unos diseños en 3d de las piezas necesarias para ello y además que tienes en tu mismo barrio una tienda que te permite imprimir dichas piezas en los materiales adecuados…. ¿Acaso es esto posible? ¡Pues sí!

En algún momento de la historia debió parecer absurdo pensar que a cada vuelta de la esquina llegarían a existir unas máquinas que permitían imprimir libros o fotocopiarlos, hoy en día tenemos esas mismas máquinas en nuestras casas… Mañana en cada esquina habrá una máquina de fabbing, y esto será una realidad… Pero ¿Porqué manñana y no ho y mismo?

Bien, para eso habrá que trabajar un poco más….

Imaginemos que conoces la existencia de una máquina de fabbing que permite imprimir las piezas de las que se compone, todas y cada una de ellas, esto es, una máquina autoreplicante… Obviamente no sería muy difícil conseguir otra, y otra, y con cada una de estas nuevas impresoras podrías imprimir otras nuevas y con cada una de las nuevísimas podrías imprimir…. en fin ¿No estaría mal, no?

Pues esa utopía tan extraña ya existe, se imprime a si misma, y se llama RepRap…  ¿Quieres una?

Existen incluso alternativas como Fab@Home que son compatibles con materiales como [[silicona]{.hps}, cemento, acero inoxidable, o incluso crema pastelera [y queso]{.hps}]{#result_box .long_text lang=”es”}… Aquí tienes las instrucciones sobre cómo construirla.

Pero no nos quedemos aquí hombre, no nos quedemos aquí, lo que queremos es cambiar el mundo… Teniendo estas herramientas, podemos construirlo todo…

Las cosas empiezan a avanzar a pasos de gigantes, The Pirate bay acaba de incorporar la categoría physibles a sus repositorios (que por cierto ya son repositorios P2P, esto es distribuídos), aunque de momento tienen pocas cosas, pero todavía tenemos los repositorios clásicos como Tingiverse… Y eso sin contar con los proyectos Open Hardware que podemos encontrar por ahí…

Empecemos…

Sé lo que estás pensando. Todo esto está muy bien, pero es demasiado ambicioso para una persona. ¡Claro! es que esa no es la idea, ¿De qué sirve que tu tengas una máquina de fabbin en tu casa? sólo la usarás para hacer jugetitos, o figuritas de merchandising… No, la idea es que empiecen a sugrir comunidades que diseñen y fabriquen este tipo de objetos, un pequeño taller que venda coches open hardware es posible. No os voy a ocultar que es posible hacer negocio con todo esto… Pero quizá la idea es que esto deje de ser necesario, cuando cada comunidad de vecinos puede tener su propia fábrica de hacer cosas, porqué va a ser necesario la compra o la venta…. Este será un mundo de la abundancia, el capitalismo que viene.

Nos queda aún hablar de muchas cosas, prometo otro artículo para la semana que viene.

Espero que os interese